El Cacao
El
cacao es una fruta de origen tropical con la que se produce el chocolate. Su
importancia en la economía de la colonia fue enorme, ya que era uno de los
productos del continente Americano más codiciados por los Europeos.
Se
cultiva en arbustos de 2 a 3 metros que deben estar a la sombra, por lo cual
normalmente se encuentran bajo árboles más grandes como el cedro, el bucare, el
mango, o el plátano, entre otros.
El árbol del cacao normalmente tiene entre 10 y 15 frutos, pero en algunas ocasiones puede llegar a 20. Existen dos tipos de cacao: uno es rojo y al madurar se transforma en morado, y el otro es verde y cuando madura se torna amarillo.
El cacao tiene unas semillas que se pueden chupar como un mamón o una guanábana. Estas semillas están cubiertas por una sustancia gelatinosa. Son dulces y muy sabrosas.
Cuando el cacao está maduro, se corta del árbol y se deja a la sombra sobre hojas de plátano por unos 3 a 6 días, para que se fermente. Es importante que tenga humedad, pero no se puede mojar con la lluvia. Luego, es puesto al sol para su secado otros 3 a 6 días.
Cuando los granos ya están secos se tuestan en un horno y luego se les quita la cáscara y se trituran.
Después de clasificar y limpiar bien los granos se tuestan con mucho cuidado, aquí es donde se consigue el aroma característico del cacao.
Los granos de cacao, limpios y tostados, se muelen hasta conseguir una pasta densa que es la pasta del cacao. La pasta se prensa para separar el cacao en polvo y la manteca de cacao. La pasta se mezcla con el azúcar, manteca de cacao, leche, almendras, según el tipo de chocolate que se quiera obtener.
La mezcla se refina hasta convertirla en una pasta uniforme, para pasar posteriormente al proceso de conchaje durante varias horas.
En este momento ya tendríamos el chocolate, sólo faltaría el moldeado, que sirve para darle forma final, que puede ser muy variada: chocolatinas, tabletas, bombones, etc.
El árbol del cacao normalmente tiene entre 10 y 15 frutos, pero en algunas ocasiones puede llegar a 20. Existen dos tipos de cacao: uno es rojo y al madurar se transforma en morado, y el otro es verde y cuando madura se torna amarillo.
El cacao tiene unas semillas que se pueden chupar como un mamón o una guanábana. Estas semillas están cubiertas por una sustancia gelatinosa. Son dulces y muy sabrosas.
Cuando el cacao está maduro, se corta del árbol y se deja a la sombra sobre hojas de plátano por unos 3 a 6 días, para que se fermente. Es importante que tenga humedad, pero no se puede mojar con la lluvia. Luego, es puesto al sol para su secado otros 3 a 6 días.
Cuando los granos ya están secos se tuestan en un horno y luego se les quita la cáscara y se trituran.
Después de clasificar y limpiar bien los granos se tuestan con mucho cuidado, aquí es donde se consigue el aroma característico del cacao.
Los granos de cacao, limpios y tostados, se muelen hasta conseguir una pasta densa que es la pasta del cacao. La pasta se prensa para separar el cacao en polvo y la manteca de cacao. La pasta se mezcla con el azúcar, manteca de cacao, leche, almendras, según el tipo de chocolate que se quiera obtener.
La mezcla se refina hasta convertirla en una pasta uniforme, para pasar posteriormente al proceso de conchaje durante varias horas.
En este momento ya tendríamos el chocolate, sólo faltaría el moldeado, que sirve para darle forma final, que puede ser muy variada: chocolatinas, tabletas, bombones, etc.